Sucedió en la peatonal Córdoba de la ciudad santafesina y terminó siendo una acusación infundada.
Una mujer llamó a la policía y le dijo que esas tres personas que caminaban por la peatonal Córdoba de Rosario le habían sustraido su teléfono celular. Nada extraño en una ciudad como la Chicago argentina, donde los índices delictuales, son elevados, excepto que los tres señalados eran los Reyes Magos.
Los tres hombres debieron someterse a un cacheo policial y aclararon la situación pese a la insistencia de la mujer.